martes, 26 de enero de 2010

Qué es y cómo hacer un Curso de Retiro

-Siempre ha sido recomendado hacer un rato de oración.

-¿Y qué es hacer oración?

-Hablar con Dios. Verás: La conciencia es como una hoquedad interior, un apartamento íntimo, un lugar tranquilo y reposado, un sitio en el bosque en el que se pueden mirar el cielo y, en su caso, las estrellas. Un lugar privilegiado en la cima de un monte, desde el que todo se ve, los caminos, los pueblos, el movimiento de los hombres y las máquinas a cámara lenta. Donde todo se comprende y se siente.

Pero también es un lugar recogido, una salita de estar con ventanales abiertos al mundo, a la vida, a los hombres, que Dios se ha construido en el interior de cada uno de nosotros para poder hablar a gusto personalmente, a solas, sin interrupciones. ¿Te he convencido? Pues eso es lo que es.

-Sigo, el tiempo de oración puede ser de 5, 10, 20, 30, ¡60! minutos diarios, siempre poco. Los Retiros mensuales amplían ese tiempo, y ayudarlo con una lectura, una meditación dirigida por un sacerdote, etc. Después, lo oído se lo puede uno llevar a su salita de estar, alias conciencia, durante el resto del mes.

-Y, además, hay Cursos de Retiro, de tres días. Lo mejor es que entonces, como focos de luz, luz intensa que no molesta, están la Sagrada Escritura y el Magisterio de la Iglesia. Así la visión es más nítida, más profunda, y si se me permite, más beneficiosa. El ambiente está sazonado por el espíritu que Dios le otorgó a san Josemaría Escrivá, orientado a la vida ordinaria. Además, en la salita Dios está más cerca que nunca, porque no solo está espiritualmente, sino sacramentalmente: no habla por teléfono, sino en persona. Para entendernos.

-Siempre ayuda verse acompañado de personas que desean lo mismo que tú, encontrar a Dios y reconectar con su voluntad. Y eso ocurre en cada Curso de retiro. La voluntad de Dios no se impone haciendo fuerza: simplemente, convence. Convence de cuál es el camino a seguir, con la evidencia de lo obvio. 

-Tengo cuatro fechas para Los Jarales, una casa de convivencias que está en Antequera. Las fechas son:

8 a 11 de febrero (de lunes a jueves)
11 a 14 de febrero (de jueves a domingo)
4 a 7 de marzo (de jueves a domingo)
15 a 18 de abril (también de jueves a domingo)

-Si estás interesado, contacta conmigo. Te vendrá muy bien.

2 comentarios:

Nacho Acedo dijo...

Asistí a mi primer curso de retiro con cierto "escepticismo" sobre lo que el mismo me iba a aportar. Después de mi segundo curso, me di cuenta que aquel escepticismo me había impedido aprovechar plenamente el primero. Realmente, si tienes la voluntad de abrirte a Dios durante esos tres días, todo es beneficio, aunque te quedes con dos o tres cosas aplicables a tu propia vida. Es verdad que nuestro Señor nos acompaña siempre, y podemos acceder a Él en cualquier sitio y momento, pero cuando estás "retirado" de la vida cotidiana, tienes más momentos de intimidad con Él. Sobre todo, son momentos mucho más fecundos. Le hablas a tu Padre, que lo es, sin interferencias, sin prisas, sin distracciones. Y aunque creo que Él siempre escucha, supongo que también te escuchará mejor en esos momentos. Creo que en el fondo es como una "cita romántica", en la que solo estás tú y Jesús, al que amas. ¿Se puede pedir más?

Anónimo dijo...

Oquedad se escribe sin h, paleto